Bonn - Internacionalidad e historia
En sus días de capital federal, el ambiente estaba fuertemente influenciado por diplomáticos y empleados de instituciones políticas. Ahora, numerosas organizaciones internacionales y sus empleados contribuyen a crear un ambiente abierto y acogedor. Al fin y al cabo, Bonn no es sólo la ciudad alemana de las Naciones Unidas, sino también un popular anfitrión de conferencias internacionales de alto nivel y la sede de muchas organizaciones no gubernamentales (ONG) alemanas e internacionales.
La internacionalidad de Bonn no es nada nuevo: la ciudad del Rin tiene una historia tan larga como llena de acontecimientos. Desde los primeros asentamientos en la Edad de Piedra, personas de diferentes culturas han vivido aquí, a orillas del Rin, durante miles de años. El asentamiento de un campamento militar romano hace unos 2.000 años, como parte del actual Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO "Lower Germanic Limes", fue especialmente formativo para el desarrollo de Bonn como ciudad. No es de extrañar, por tanto, que en el paisaje urbano de Bonn aún queden vestigios de la época romana. Numerosas reliquias se exponen también en los museos de la ciudad, como el "LVR-LandesMuseum Bonn".
Hachas de mano neolíticas, esculturas romanas, joyas celtas o escritos medievales son testimonios vivos de que aquí, a orillas de uno de los ríos y rutas de transporte más importantes de Europa, el Rin, siempre han venido, ido y se han quedado gentes de distintos orígenes. Este fue el telón de fondo para el desarrollo del proverbial estilo de vida renano, que se enfrenta a otras personas y a la vida misma con amplitud de miras, curiosidad y tolerancia. En primer lugar, los renanos parten de la base de que nada puede cambiar en el curso de los acontecimientos: "Et kütt wie et kütt" (Todo saldrá como saldrá) es un dicho habitual en el dialecto renano. Además, la gente está convencida de que al final todo saldrá bien. ("Et hätt noch emmer joot jejange" - Siempre ha salido bien.) Esta aceptación de lo inevitable, unida a un optimismo inquebrantable, ha llevado a los habitantes de Bonn a través de tiempos turbulentos.
Ludwig van Beethoven - El mejor hijo de Bonn
La época como ciudad residencia electoral fue sin duda una de las épocas doradas de Bonn, cuando se construyeron magníficos edificios como el palacio de la residencia electoral (el edificio principal de la universidad en la actualidad) o el palacio Poppelsdorf. Este periodo también está indisolublemente ligado a la vida del gran hijo de la ciudad, Ludwig van Beethoven, cuya música alcanzó fama mundial. Su legado es muy valorado y se mantiene vivo en Bonn, ya que Beethoven no sólo fue un artista brillante y dotado, sino también un apasionado defensor de valores que siguen vigentes hoy en día, como la libertad y la fraternidad. Además de su mundialmente famosa casa natal, la "Beethoven Orchester Bonn" y el Festival Beethoven, que se celebra anualmente, se encargan de que esté presente en toda la ciudad y de que su música inmortal y su espíritu cosmopolita sigan difundiéndose por todo el mundo.
Bonn, cuna de la democracia federal alemana
Los habitantes de Bonn consideran el periodo de la recién fundada República Federal de Alemania como uno de los más destacados de la historia de su ciudad (y que sigue teniendo repercusiones hasta hoy). Al fin y al cabo, casi nadie habría predicho que la más bien pequeña ciudad a orillas del Rin a finales de los años 40 se convertiría en la cuna de la democracia de Alemania Occidental y en la capital de la nueva República Federal tras el final de la II Guerra Mundial. Durante más de cinco décadas, la (modesta) ciudad de Bonn fue el escenario en el que actuaron tanto la política de Alemania Occidental como los invitados estatales internacionales. Una gota de amargura en la alegría de la unificación con la República Democrática Alemana (RDA) fue, después de todo, la decisión del Bundestag de volver a otorgar a Berlín el papel principal en el gobierno.
Una ciudad se reinventa
Sin embargo, una vez más, Bonn demostró su enorme potencial para reinventarse. En términos de política federal, la ciudad sigue siendo el segundo centro político de Alemania; como "ciudad federal", sigue siendo sede de numerosos ministerios y organismos federales. Tras una fase de cambios estructurales, Bonn avanzó hasta convertirse en un emplazamiento empresarial muy codiciado tanto por jóvenes empresas innovadoras como por grandes actores mundiales. La antigua sede de autoridades y servicios públicos se ha convertido en una de las regiones de crecimiento más atractivas de Alemania.
Bonn también sigue desempeñando un papel en la política internacional y en cuestiones globales: Por ejemplo, Bonn es un anfitrión competente y experimentado de grandes conferencias internacionales, como la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático COP23 (2017), la mayor conferencia celebrada en Alemania hasta la fecha. Bonn es sede oficial de las Naciones Unidas desde 1996. El número de organizaciones que operan desde aquí ha aumentado hasta 26, entre ellas la Secretaría Mundial del Clima (CMNUCC) y la Secretaría de la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación (CNULD).
Sin embargo, el lema "Forjar un futuro sostenible" no sólo engloba a la familia de la ONU de Bonn, con unos 1.000 funcionarios en el Campus de la ONU de la ciudad. También reúne a unas 150 ONG alemanas e internacionales. Su cooperación constructiva se ve estimulada por su proximidad, que acorta las distancias entre los agentes de la sostenibilidad.
Además de las empresas y las instituciones políticas, las instituciones científicas, en rápida expansión, también son de gran importancia para Bonn. Por ejemplo, la Universidad Friedrich Wilhelm de Bonn es una de las pocas universidades de excelencia de Alemania. La oferta diferenciada de varias universidades, así como de renombradas instituciones de investigación, hace que Bonn goce también de un gran reconocimiento internacional como emplazamiento científico.
En vista de estas ventajas de ubicación, no es de extrañar que Bonn sea una ciudad con una población en continuo crecimiento. Por un lado, esto se debe al excepcional repertorio de oportunidades laborales, especialmente para académicos altamente cualificados. Por otro lado, se debe al carisma vital de la propia ciudad y a la belleza paisajística de la región a orillas del Rin.
Bonn y el Romance
Pintores, poetas y compositores como Heinrich Heine, Victor Hugo y Robert Schumann no se cansaban de admirar el río y los paisajes vírgenes que lo rodean, con castillos, palacios y viñedos. El entusiasmo romántico por el Rin sentó las bases del turismo renano, que floreció ya en el siglo XIX con la introducción de los viajes regulares en barco de vapor. Así, a mediados del siglo XIX, se dice que no menos de un millón de personas al año disfrutaban de las bellezas de Bonn como "puerta del Rin romántico" a bordo de un barco. Aún hoy, Bonn y su región son una "visita obligada" para muchos viajeros europeos.
Bonn tiene muchos monumentos que ofrecer, como el Antiguo Ayuntamiento de estilo rococó o los antiguos edificios de la alta política. Una atracción especial es la temporada de floración de los cerezos en el casco antiguo de Bonn "Altstadt", como se llama cariñosamente a la Ciudad Interior del Norte. Durante unas dos semanas cada primavera, el "sueño rosa" atrae a Bonn a multitud de entusiastas de cerca y de lejos. Diferentes barrios como Südstadt, con sus casas de estilo guillermino, o el distrito de villas de Bad Godesberg invitan a relajantes paseos. En Bonn se puede llegar a todo esto a pie, en bicicleta o en un corto trayecto en transporte público. Esto hace que la ciudad resulte atractiva tanto para visitantes como para residentes.
Fiestas y cultura
Los interesados en la cultura encuentran en Bonn el valor de su dinero. Por un lado, Bonn cuenta con museos de renombre internacional como el Museo de Investigación Zoológica Alexander Koenig, la August Macke Haus, el "Bundeskunsthalle" o la "Haus der Geschichte der Bundesrepublik Deutschland". Por otro lado, la escena teatral local ofrece una impresionante variedad de espectáculos. Desde la comedia stand-up al cabaret, pasando por la ópera clásica, encontrará una amplia oferta de escenarios y eventos teatrales en grandes y pequeños teatros. Muchos cómicos y actores comenzaron sus carreras en los escenarios de Bonn y, a día de hoy, disfrutan volviendo a la ciudad.
Además, la ciudad alberga numerosos festivales, entre los que destaca el anual "Beethovenfest" (Festival Beethoven), que -gracias a los esfuerzos de la Orquesta Beethoven de Bonn y su director musical Dirk Kaftan- tiende un puente entre la música clásica y la de vanguardia. Pero los amigos de otros géneros musicales también tienen mucho donde elegir con festivales y conciertos en lugares muy diversos, como el "Jazztube Bonn" en estaciones de metro, "Panama Open Air" en el parque de ocio "Rheinaue", el "One World Festival" en el "Beueler Brückenforum" o el "Concurso Internacional Telekom Beethoven" en la sede de Telekom.
La oferta gastronómica de Bonn es muy variada, con tabernas tradicionales renanas de estilo cervecero y una moderna cultura de club que se complementan entre sí. Los restaurantes también ofrecen cocina regional sencilla y una gran variedad de especialidades de todo el mundo.
Bonn es una forma de vida
Los habitantes de Bonn aprecian la alta calidad de vida de su ciudad: numerosas y amplias zonas verdes y parques, hermosos paseos por el Rin y una buena red ciclista, por lo que a la gente le gusta pasar su tiempo libre al aire libre. Los habitantes de Bonn se sienten muy vinculados al tema de la sostenibilidad. Bajo el lema "Pensar globalmente - actuar localmente", Bonn se ha fijado el objetivo de aplicar la Agenda 2030. Para ello, se elaboró una estrategia municipal de sostenibilidad que se adoptó en 2019. Por supuesto, esto no puede hacerse sin la implicación y participación de los ciudadanos. La participación ciudadana es expresamente deseada y fomentada por la ciudad, apoyándose en diferentes formas de participación para avanzar juntos en el desarrollo urbano a muchos niveles y en diferentes proyectos. Los habitantes de Bonn están convencidos de que juntos pueden conseguir que su ciudad, habitable y amable, esté preparada para el futuro.